7.3.09

Día 243. (060309)

Flor helicóptero

En un momento dado de su madurez, sus pétalos comienzan a girar a varias revoluciones por minuto, de tal modo que se despega llevando un trozo de su tallo, y así emigra muchos cientos de kilómetros, aumentada su velocidad gracias a los vientos propicios y a su ligereza. Se encuentra a veces en su viaje con las mariposas monarca, y por fin llega a tierra más cálidas, aterriza y enraíza en tallos de otras plantas, en troncos de árboles, en la tierra misma, o en lugares más inesperados, como cabezas de muros, techos de azoteas, cubetas abandonadas e incluso en tiraderos de basura. Ya ahí siguen creciendo y dan lugar a nuevos brotes de las mismas flores, que regresan, cuando se han hartado de calores, a sus sombríos bosques del lejano norte del continente.